En esta ilustración me apetecía meter texturas y jugar un poco con un estilo de dibujo suelto y nada comprometido con una figuración estricta y constreñida. Bueno. Ahí queda.
domingo, 20 de diciembre de 2009
Pánico en blanco y negro
sigo dibujando al ordenador
lunes, 7 de diciembre de 2009
nuevas imágenes realizadas por ordenador
Continúo investigando con el ilustrator, ahora realizando pequeños dibujos coloreados. El formato que me pide el blog para editar las imágenes, el jpg, no respeta el formato original, con lo que los márgenes de blancos quedan alterados con respecto a cómo pretendía yo que se viera la ilustración, o con como pretendo que quede impresa. Por lo menos el publicarlos en el blog sirve para hacerse una cierta idea de por donde van las formas y los colores, y no pretendo más.
En otro orden de cosas, continúo produciendo bastantes acuarelas sobre papel (gustoso, de 300 gr, que absorbe muy bien el agua y proporciona buen soporte para trabajar). También estoy investigando con la tinta y la témpera blanca: primero dibujo con plumilla las lineas negras de las formas, de manera muy explícita y sensible. Luego me dedico a añadir la témpera blanca, con el pincel de modo caótico, en capa bastante gruesa y mezclando a trozos con la tinta previamente depositada, y sin embarduñar demasiado. Queda así una mezcla entre lo muy cuidado y lo impulsivo que resulta muy rica. No tengo ejemplos en el ordenador en este momento, en cuanto pueda añado imágenes, aunque no se si en la fotografía harán justicia a la textura superficial.
domingo, 22 de noviembre de 2009
Dibujos hechos por ordenador
Estoy trasteando con el ordenador y han salido estas ilustraciones. El curso de diseño gráfico de Inedi está resultando muy agradable, me gusta lo que aprendemos y la relación con los compañeros. Además me ha dado muchas ganas de ir sacando de dentro imágenes también de este modo. Procuro que queden un poco desmañadas de apariencia, como si fueran dibujadas por un crio con un lapicero y una caja de temperas de colores, o quizás recortando papeles y haciendo collages caseros, todo con una estética de lo precario y lo técnicamente abrupto.
En otro orden de cosas, tengo una noticia que quiero que no os olvidéis: el día 12 de diciembre tiene lugar el coloquio de creaturas. Para mayor información tendréis que entrar en su blog con el link de la entrada de un poco mas abajo. Parece que va a estar interesante.
sábado, 14 de noviembre de 2009
Cartel del Festival Internacional de Titeres de Bilbao
El festival Internacional de Titeres de Bilbao ha premiado la labor de Edurne y mia con el cartel de este año del mencionado festival. El enlace es el siguiente:
http://www.pantzerki.com/interiores/home_fr.html.
jueves, 5 de noviembre de 2009
Muñecas recortables en el curso de Diseño Gráfico
He estado haciendo unos trabajos de trazados en el ordenador de Inedi, el centro de diseño donde estoy estudiando. No pasan de ser ejercicios de clase, y además el color se ha trastocado, pero me hacia ilusión subirlo al blog para que echarais un ojo a lo que voy haciendo ultimamente. Me lo paso bien, la verdad es que está divertido.
También he estado trasteando dibujos a témpera y a tinta para la clase de ilustración, un cursillo que tenemos en la Biblioteca Foral. A ver si les saco foto y las añado, alguna ha quedado majilla.
jueves, 8 de octubre de 2009
Estoy tratando de copiar una reseña de la casa de arte bruto Creaturas, que es mi galeria. Que se le va a hacer, habrá que conformarse con añadir el link y que cada uno se autogestione la información. Allá va: http://www.creaturas.org/2009/05/arantza-rey.html Si picais esta dirección aparece el link donde está mi obra en la galeria virtual. Por cierto, que el nombre de este blog tiene su razón de ser en mi nombre: me llamo Arantza, que en euskera significa espina, y me apellido Rey.... obvio.
Algunas imagenes salteadas de mi bloc de acuarela
Tengo varios blocs de acuarela, donde dibujo y pinto con mucho gusto y alegria. Estoy yendo al estudio "El Pincel", de Rosa Valbuena, donde tengo la oportunidad de que ella me guie y me aconseje para pintar temas que me hagan sentir bien. Ella dice que valgo para la ilustración, y me está apoyando a que vaya por ese camino. La estoy haciendo caso, me gusta dejarme influir, mas por gente con la profesión y el buen hacer de Rosa. Este año estoy muy activa en esa dirección de pintar ilustraciones e imagenes amables para cuentos, voy a empezar a asistir a clases de diseño grafico para ordenador en la academia Inedi. A ver que tal. Ya os iré contando.
Fotografias del proceso de elaboración de Caperu
Este es el primer boceto de caperu a la acuarela, en mi bloc de acuarela. Previamente saque un dibujo a plumilla y tinta morada, que como me gustó mucho lo pasé a mas grande. Posteriormente, al enseñarle la obra a Batirtze, me encargó que se lo pintara en grande.
En estas fotografias se ve como fue el proceso de realización del cuadro de Agosto "Caperu, que se ha topado con un lobito vanguardista y tiene zuto". Se trata de un encargo en base a unos bocetos que tenia de imaginación. El cuadro lo hice en un lienzo tres dimensiones, que tienen ese borde tan gustoso para pintarlo y no ponerle marco. Tal como estoy elaborando el acrilico esta última temporada, estoy haciendo capas muy finas, que transparentan el blanco del fondo, para darle mucha luminosidad y alegria a la pintura. Claro, el color que se consigue es fantástico, aunque el proceso se me hace muy dificil: para pintar los colores sobre fondo blanco tengo que ir imaginandome el resultado, descontextualizando de lo que veo con los ojos, asi que el ojo está constantemente engañandome y haciendome sentir desmoralizada, y tengo que contar con lo que se sobre pintura y con mi visualización en la cabeza, mas que lo que voy viendo. Hasta el final el cuadro no sale a la luz. Aqui he puesto dos imagenes del proceso, uno con el cuadro terciadito y otro cuando solo faltaba el darle las lineas negras de dibujo. Pinto sobre la mesa de la cocina, para que la pintura no se corra, porque al darla muy liquida, sobre caballete no controlaria bien el resultado. El cuadro lo pinté para Batirtze, que es muy maja y que rezo desde aqui para que se le revalorice mucho y haya hecho una buena inversión.... y para que lo disfrute cantidad.
En Septiembre vio la luz Matilde
En Septiembre he estado realizando un encargo del que estoy especialmente contenta: se trata del cuadro "Matilde reflexionando acerca del Binomio de Newton". Se trata de un acrílico dedicado a una niña muy pequeña, que se llama Matilde. Me da la sensación de que este cuadro acompañará sus primeros años de vida, y será un referente visual constante, asi que me parecia mucha responsabilidad, y queria hacerlo muy bien. He procurado que fuera tierno, cuidado y nada cursi, a la vez que alegre y apropiado para decorar la habitación de la niña. Estoy contenta del resultado.
domingo, 6 de septiembre de 2009
viernes, 17 de julio de 2009
El sabado pasado pinté un cuadro 4 figura (33 x 24 cm) que se titula "El oscuro encanto de la mujer que se muestra": me gusta, es feísimo, la señora es mala malona y de mirada aviesa y sonrisa inquietante ... tiene un punto perverso a la misma vez que simpático. Está pintado al acrílico. Lo que mas me gusta es que tiene el trazo muy suelto y las lineas no siguen el color de manera agarrada, sino que juegan en una dialéctica entre el color y el dibujo que le da mucha pulsión gráfica. Me encanta dibujar, estoy todo el día con el estilógrafo en la mano, y de vez en cuando salen cosas con las que me siento a gusto. En concreto estas lineas trazadas a pincel con pintura negra, seguras pero con el punto de frescura que les da la rapidez de ejecución me alegran para verlas. La señora de la imagen parece una madrastrona del siglo XIX con ganas de hacernoslas pasar mal.
viernes, 10 de julio de 2009
Juan no entiende nada
(adaptación de “El elefante encadenado”, cuento de Jorge Bucay)
Dedicado a José Perez Agote de parte de Arantza Rey Aurrekoetxea.
Una tarde de verano, que Juan se había portado muy bien y que había ayudado a barrer toda la casa, sin dejarse los rincones, ni debajo de las alfombras, los papás de Juan le preguntaron que quería hacer para pasar un buen rato. Ese agosto había llegado a la ciudad un circo muy grande, con trapecistas, leones, payasos y muchos otros animales y atracciones. A Juan le gustaban mucho los circos. El animal que mas le gustaba en el circo era el elefante. Pero también era el animal que más le extrañaba. El elefante era poderoso. El elefante era poderoso y grande. Pero el elefante, que era tan tan grande y tan tan poderoso estaba atado a una minúscula estaca y no se movia para nada del sitio. Cuando estaban mirando desde la barrera, antes de coger las entradas, los animales que estaban resguardados bajo los toldos, Juan no pudo reprimir la curiosidad.
Entonces Juan le preguntó a su mamá:
- Mamá, ¿por qué el elefante no se separa de la estaca?
Y la mamá de Juan le contestó:
- Porque está domesticado, Juan.
Aaaah, respondió Juan sin comprender qué significaba aquello de estar “domesticado”.
Entonces Juan le preguntó a su papá:
- Papá, ¿por qué el elefante no se separa de la estaca?
Y el papá de Juan le contestó:
- Porque está domesticado, Juan.
Aaaah, respondió Juan sin comprender una vez más qué significaba aquello de estar “domesticado”.
Paso un rato en que la cara de Juan reflejaba la mas profunda perplejidad. Uno de los domadores lo advirtió y, sonriendo, se acercó a Juan.
- “¿Qué te pasa, Chaval?” Le preguntó con aire despreocupado, pero observando atentamente la cara de Juan.
- “Que no entiendo qué es estar domesticado” le contestó Juan aliviado de poder expresar sus dudas.
- “Mira, hijo, el elefante no sabe que es muy muy fuerte y que puede librarse de su atadura. Cuando era pequeñito le atamos a la estaca, que entonces era muy grande y muy recia para el. Trato de liberarse, pero no pudo. Lo intentó mucho, muchísimo, pero no pudo. Hasta que se dio por vencido. Ahora ya no intenta liberarse. Desde que se convenció que no podía no ha vuelto a intentarlo. Ahora, si lo intentara, podría, pero ya no hace esfuerzos. Se ha acostumbrado a su destino. A eso se le llama estar domesticado.”
- No entiendo, le espetó Juan sin cejar en su empeño de desentrañar la cuestión, ¿el elefante no piensa? ¿no ve que la estaca es muy pequeña? ¿no se ve el muy grande?
- El domador le miró con cierta pena. Sonrió tenuemente, acarició la cabeza del niño y musitó. “Algún día entenderás, hijo. Cuando sea demasiado tarde y tu también estés domesticado, cuando no te acuerdes de esta conversación y hayas perdido todos tus ideales, cuando la rutina te lleve a una vida sin sentido y solo te quede rodar de psiquiatra en psiquiatra tratando de desentrañar la causa de malestares misteriosos que te tienen atado en un sinvivir, entonces quizás entiendas lo que te estoy tratando de explicar.”
Juan no preguntó nada mas. Agarró la mano de su madre y continuó avanzando junto con ellos hacia la entrada del circo para ver el espectáculo. Para dentro de si se marchó pensando “Qué señor más raro”.
(adaptación de “El elefante encadenado”, cuento de Jorge Bucay)
Dedicado a José Perez Agote de parte de Arantza Rey Aurrekoetxea.
Una tarde de verano, que Juan se había portado muy bien y que había ayudado a barrer toda la casa, sin dejarse los rincones, ni debajo de las alfombras, los papás de Juan le preguntaron que quería hacer para pasar un buen rato. Ese agosto había llegado a la ciudad un circo muy grande, con trapecistas, leones, payasos y muchos otros animales y atracciones. A Juan le gustaban mucho los circos. El animal que mas le gustaba en el circo era el elefante. Pero también era el animal que más le extrañaba. El elefante era poderoso. El elefante era poderoso y grande. Pero el elefante, que era tan tan grande y tan tan poderoso estaba atado a una minúscula estaca y no se movia para nada del sitio. Cuando estaban mirando desde la barrera, antes de coger las entradas, los animales que estaban resguardados bajo los toldos, Juan no pudo reprimir la curiosidad.
Entonces Juan le preguntó a su mamá:
- Mamá, ¿por qué el elefante no se separa de la estaca?
Y la mamá de Juan le contestó:
- Porque está domesticado, Juan.
Aaaah, respondió Juan sin comprender qué significaba aquello de estar “domesticado”.
Entonces Juan le preguntó a su papá:
- Papá, ¿por qué el elefante no se separa de la estaca?
Y el papá de Juan le contestó:
- Porque está domesticado, Juan.
Aaaah, respondió Juan sin comprender una vez más qué significaba aquello de estar “domesticado”.
Paso un rato en que la cara de Juan reflejaba la mas profunda perplejidad. Uno de los domadores lo advirtió y, sonriendo, se acercó a Juan.
- “¿Qué te pasa, Chaval?” Le preguntó con aire despreocupado, pero observando atentamente la cara de Juan.
- “Que no entiendo qué es estar domesticado” le contestó Juan aliviado de poder expresar sus dudas.
- “Mira, hijo, el elefante no sabe que es muy muy fuerte y que puede librarse de su atadura. Cuando era pequeñito le atamos a la estaca, que entonces era muy grande y muy recia para el. Trato de liberarse, pero no pudo. Lo intentó mucho, muchísimo, pero no pudo. Hasta que se dio por vencido. Ahora ya no intenta liberarse. Desde que se convenció que no podía no ha vuelto a intentarlo. Ahora, si lo intentara, podría, pero ya no hace esfuerzos. Se ha acostumbrado a su destino. A eso se le llama estar domesticado.”
- No entiendo, le espetó Juan sin cejar en su empeño de desentrañar la cuestión, ¿el elefante no piensa? ¿no ve que la estaca es muy pequeña? ¿no se ve el muy grande?
- El domador le miró con cierta pena. Sonrió tenuemente, acarició la cabeza del niño y musitó. “Algún día entenderás, hijo. Cuando sea demasiado tarde y tu también estés domesticado, cuando no te acuerdes de esta conversación y hayas perdido todos tus ideales, cuando la rutina te lleve a una vida sin sentido y solo te quede rodar de psiquiatra en psiquiatra tratando de desentrañar la causa de malestares misteriosos que te tienen atado en un sinvivir, entonces quizás entiendas lo que te estoy tratando de explicar.”
Juan no preguntó nada mas. Agarró la mano de su madre y continuó avanzando junto con ellos hacia la entrada del circo para ver el espectáculo. Para dentro de si se marchó pensando “Qué señor más raro”.
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